En la calle
Hace poco vi en la noticias que hay un japonés (¿o coreano?) que se dedica a recorrer distintos lugares del mundo a pie, realizando larguísimas travesías por todo tipo de parajes. Ahora iba a estar caminando desde Antofagasta hasta el norte de Argentina. A todos lados va con ese carrito típico de los japoneses (¿o chinos?), en el que lleva agua y alimentos.
La gracia de esto no es sólo la caminata, sino, y mucho más, la razón de la caminata. Según el japonés, sólo caminando se puede realmente conocer el mundo y a la gente. No puedo estar más de acuerdo.
Yo creo que de todas las clasificaciones-generalizaciones que se hacen de la gente -personalidad, intereses, modas, etc.-, hay quizás sólo una que me resulta confiable, probablemente por lo familiar: dividir a las personas entre los que "tienen calle" y los que "no tienen calle".
Tener calle es algo que no está determinado ni por estrato socioeconómico, nivel educacional, credo religioso, tendencia política, ni nada por el estilo. Tener calle es tan simple como la costumbre de andar por la calle. A pie. Pisar la calle.
Andar por la calle, salir a la calle, incluso al pasaje del condominio, implica un riesgo. Esa es una forma de verlo. Implica una oportunidad de conocer, es otra. Y nada se conoce como en la calle, sin quererlo, sin buscarlo, pero absorviéndolo desde el alma de la experiencia.
Aquí las calles no cambian
Las calles lo que cambian son los edificios
Pero las calles siguen siendo las mismas
En la calle
No se sabe
Fíjate bien (donde vas a pisar)
Mientras estés...
Tea Time - En la calle
*No pude encontrar en ningún rincón de la red una foto del chino o coreano o japonés o lo que fuera. Si algún lector de este blog pudiera encontrar una y mandármela o darme el link de donde sacarla, se lo agradecería.
posted by Zahorí @ 8:46 p. m.
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