El domingo 28 de mayo nos reunimos como mil chilenos en el Parque O'Higgins a reclamar una legislación más justa en materia de drogas, y lógica respecto de abolir al narcotráfico: o sea, permitir el autocultivo y libre consumo de marihuana. Así de simple y natural. El senador Nelsón Ávila habló en favor de la causa. Casi ningún medio de comunicación cubrió la manifestación, que reunió más de mil firmas que se suman a las más de cuatrol mil recolectadas en una manifestación similar hecha en el Parque Forestal el año pasado.
¿Cuando la legislación, y antes la sociedad entera, se darán cuenta de lo absurdo de su lógica, de lo insensato de sus prejuicios? ¿Cuando cacharán que fumar marihuana no me define como persona, que es sólo una afición, un gusto, que no daña absolutamente a nadie (al menos no en la medida de otras drogas, como el alcohol y el tabaco, de consumo regular en el mundo entero y que pocos condenan)?
Bueno, habrá que esperar no más. Yo por mi parte sigo fumando sin problemas frente a la persona que sea y no le niego a nadie mi afición. Ejerzo mi derecho natural con la naturalidad de quien lo sabe inherente.
En la manifestación había muchas familias, ancianos y niños. Uno de estos niños se acercó a mi y a mis amigos, jugando con un globo verde (en la foto). Jugó un rato con nostros, provocando la simpatía y sonrisa de todos, al mismo tiempo que reivindicaba con su inocencia la nuestra...