Life ain't so bad at all

Michael, hermano, hace rato que tenía que rendirte homenaje aquí. Compadre, no hay nada que pueda decir de ti que no se quede chico al lado de lo que fuiste, erís y serás: el mejor y más grande solista de toda la historia de la humanidad.

Toda una vida de talento explosivo, de aprender desde chico de los que hasta antes de ti fueron los más grandes: Stevie y James, además de Quincy y cien más. Cómo aprendiste y cómo superaste. Hermano... lo más grande. Otra weá. Para de inspirar a millones en todo el planeta. Relajado que desde Jesús que no había un weón que dejara tanto la patá e inspirara tanto como tú. Y yo creo que eso es lo más grande que puede hacer ni siquiera un artista, si no una persona: inspirar a otras. Y voh, perro, erai el inspirador por antonomasia.

Tus canciones hablan sobre todo, tu danza comunicaba la vida entera, tu talento de semidios sólo era comparable con tu esfuerzo sobrehumano. Esfuerzo por derrochar espectáculo, por darlo todo, por hacernos reir, sonreir, sorprendernos. Viejo: OTRA WEÁ.

Maicol, como tú, nadie. A lado tuyo Madonna casi que no existe, y Madonna es grandiosa. Elvis siempre mounstruo, pero ni a los talones. El mismo James te admiró desde el principio, y por algo es el padrino. Y cualquier otro weón que nombremos derechamente no existe, no es nada más que un esfuerzo misereble por ser un quinto de ti: Justin, Beyonce, Britney, Robbie Williams, Elton, Lenny Kravitz, Snoop... puros pequeños.

Mientras escribo sé que no baja del millón el número de personas que en este momento están escuchando algo tuyo. Yo cierro con una canción que ya no fue de las más famosas, pero puta que es de las mejores...

Hermano, con los ojos húmedos, te aseguro que tú espíritu sigue vivo en todos nosotros, 'cause we're the party people night and day, livin' crazy that's the only way...

Gracias por todo, hermano. Por la alegría, la inspiración, la música y la magia. De todo alma y corazón: muchas gracias.






Life ain't so bad at all
if you live it off the wall...